Bujis (nombre griego) o Baj (nombre egipcio) es el nombre que recibía el toro considerado la encarnación de Ra y Osiris en la mitología egipcia; también era el ka de Montu.[1] Estaba relacionado con el poder germinador y la fecundidad del suelo.
Se elegía un toro salvaje como encarnación de Montu, y era venerado como tal. Con el tiempo los criterios para elegir el toro se hicieron más rígidos, eligiendo toros con el cuerpo blanco y la cara negra. Cuando estos toros (o sus madres) morían eran momificados, y se llevaban a un cementerio conocido como el Bujeum. Las madres fueron consideradas como representaciones de Hathor, la madre de estas deidades.