Se conoce como dahir (en árabe, ظهير ẓahīr, pronunciado ḍahīr en árabe marroquí) a los decretos emitidos por el rey de Marruecos.
Sin embargo, en el ámbito del Protectorado español, los Dahir eran dictados por el Jalifa -a propuesta del Alto Comisario español-, en su condición de representante en el territorio del Sultán, pues este residía en el Protectorado francés.