Las decenales o fiestas decenales (decennalia, del latín: decennium, "década"; de decem, "diez" y annus, "año") eran fiestas solemnes que instituyó Augusto en Roma en celebración de haber cumplido diez años de Imperio.
En ellas, se celebraba la felicidad pasada, y se hacían votos por la futura en otro decenio. El origen fue, que habiéndose concedido a Julio César la suma potestad por diez años, aunque este no los cumplió. Augusto, cuando llegó á ellos, hizo por ceremonia una especie de dimisión momentánea; pues inmediatamente como rogado del pueblo, volvió a empuñar el cetro por otros diez años, esto para conservar alguna sombra de libertad en el Senado y pueblo romano, lo que imitaron después los otros emperadores que llegaban o pasaban de los diez años.
Dion Casio lo da a entender diciendo :
Singulis decenniis festum quasi ob ejus renovationem agunt, quod hodie etiam fit.Cada diez años, casi a modo de renovación, hacen una fiesta, que todavía hoy se realiza.
La formalidad de los votos que se hacían en esta función consta de una epístola de Plinio el Joven a Trajano , en que le dice:
Vota, domine, priorum annorum nuncupata alacres laetique persolvimus; novaque rursus, curante commilitonum et provincialium pietate, suscepimus: precati deos, ut te remque publicam florentem et incolumen ea benignitate servarent.
Tuvieron especial celebración las decenales del tiempo de Galieno, como expresa Trebelio Polión:
Decennalia celebravit novo genere ludorum, nova specie pomparum, exquisito genere volaptatum.Las decenales han permitido celebrar un nuevo tipo de juegos, una nueva especie de desfiles, una rara forma de placeres.