El marinado es una técnica de cocina mediante la cual se coloca un alimento en remojo de un líquido aromático durante un tiempo determinado (desde un día hasta varias semanas), con el objeto de que tras este tiempo sea más tierno o que llegue a estar más aromatizado. Antiguamente era considerado un método de conservación de ciertos alimentos,[1] aunque hoy en día este efecto se pone en duda para algunos tipos de marinados.[2]
Es un proceso con una denominación general, ya que dependiendo del ingrediente líquido sobre el que se sumerja, el marinado puede tener otros nombres más específicos, como, por ejemplo:
Por regla general, el marinado se aplica a carnes y pescados, y más raro es hacerlo a verduras, conocidas como encurtidos.
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