Un veedor es un inspector, visitador, observador.[1] En la Corona de Castilla era un funcionario que tenía un carácter fiscalizador en las ciudades y villas por los que se controlaban que las obras de los gremios o las instituciones responsables del abastecimiento de los municipios eran conformes con las leyes u ordenanzas. También ejercían de visitadores o pesquisidores de las villas o tierras ejerciendo funciones judiciales o fiscales.[2]