El Ager Romanus (“campo romano” en castellano), en la Antigua Roma, designaba el territorio rural en torno a la ciudad de Roma. No recibió modificación durante largo tiempo, permaneciendo así de propiedad civil (dominium ex jure Quiritium). Algunos autores también han aplicado este concepto a las tierras conquistadas, bastante lejanas de la ciudad, pero nunca a las situadas fuera de Italia.
Política e históricamente, el Ager Romanus se incluyó dentro del área de influencia del gobierno municipal de Roma. Al sur limita con los montes Prenestinos, los montes Albanos y las llanuras pontinas, al oeste con el mar Tirreno, al norte con las colinas que rodean el lago de Bracciano y al este por los montes Tiburtinos.