Este artículo trata especialmente sobre la palabra «braga» y de la evolución de dicha prenda desde el tiempo de los romanos. El término como tal solo quedó recogido en España para referirse a la prenda interior que usan las mujeres, cuya equivalencia en otros países hispanos ha dado lugar a palabras totalmente distintas pero en definitiva con el mismo significado.
Las bragas, como prenda interior femenina a partir del siglo xviii, es un complemento que cubre desde la cintura hasta el arranque de las piernas, que a lo largo del tiempo ha variado su forma y diseño en virtud de la moda.[1] Tuvo su origen en los calzones y calzas de la Antigüedad. En el siglo xxi, el equivalente para hombres es el calzoncillo.