En el marco del hinduismo, la kundalini (en sánscrito: कुण्डलिनी, AITS: kuṇḍalinī, en castellano: 'la enroscada')[1] es la energía vital (denominada prana), cuyo flujo se visualiza
y/o se representa como una serpiente enroscada en espiral y dormida en el muladhara chakra.[2] Cuando la kundalini se despierta, la consciencia del mundo emerge.[1][3]
La kundalini es la energía primordial o shakti que llega a desarrollarse en plenitud al reunirse con la conciencia (Shivá), y el atma (alma) con el Brahman.
Varias doctrinas utilizan este concepto de la kundalini: