Pandemia de gripe de 1918 | ||
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Hospital improvisado en Camp Funston, Kansas, en 1918. | ||
Agente patógeno | ||
Patógeno | Influenzavirus A subtipo H1N1 | |
Tipo de patógeno | Virus | |
Enfermedad causada | Gripe de 1918 | |
Datos históricos | ||
Inicio | Febrero de 1918[1] | |
Fin | Abril de 1920 | |
Lugar de inicio | Divergencia entre China,[2] o Kansas, Estados Unidos | |
Nivel del contagio | Pandemia | |
Datos del contagio | ||
Fallecidos | 50-100 millones (estimado) | |
La pandemia de gripe de 1918, conocida inicialmente como Soldado de Nápoles, y posteriormente también como gripe española o trancazo,[3][4] fue una pandemia causada por un brote del virus de la gripe tipo A, subtipo H1N1.[5] A diferencia de otras epidemias de gripe que afectan principalmente a niños y ancianos, sus víctimas fueron también jóvenes y adultos con buena salud, y también animales, entre ellos perros y gatos.[6][7] Se considera una de las pandemias más devastadoras de la historia humana, ya que en solo un año acabó con la vida de entre 20 y 40 millones de personas.[8][9][10][11] Esta cifra de muertos, que incluía una alta mortalidad infantil, se considera uno de los ejemplos de crisis de mortalidad.[12]
La enfermedad fue notificada por primera vez el 4 de marzo de 1918, en Fort Riley (Kansas, Estados Unidos), aunque ya en el otoño de 1917 se había producido una primera oleada heraldo (ya que es la que anunciaba la llegada del resto) en al menos catorce campamentos militares.[13] Tradicionalmente, se ha localizado al paciente cero en Estados Unidos, concretamente, en el condado de Haskell, en enero de 1918,[14] y en algún momento del verano de ese mismo año este virus sufrió una mutación o grupo de mutaciones que lo transformó en un agente infeccioso letal. El primer caso confirmado de la mutación se dio el 22 de agosto de 1918 en Brest, el puerto francés por el que entraba la mitad de las tropas estadounidenses aliadas en la Primera Guerra Mundial.[15]
Recibió el apelativo de gripe española porque la pandemia ocupó una mayor atención de la prensa en España que en el resto de Europa, ya que España no estaba involucrada en la Primera Guerra Mundial y por tanto no se censuró la información sobre la enfermedad.
Con el fin de estudiar la pandemia de gripe, los científicos han empleado muestras de tejido de víctimas congeladas para reproducir el virus.[16] Dada la extrema virulencia del brote y la posibilidad de escape accidental (o liberación intencionada) de la cuarentena, hay cierta controversia respecto a las bondades de estas investigaciones. Una de las conclusiones de la investigación fue que el virus mata a causa de una tormenta de citocinas, lo que explica su naturaleza extremadamente grave y el perfil poco común de edad de las víctimas.