En el judaísmo, un rabino (en hebreo רַבִּי rabī (en yidis se acuñó el término רבה Rebeh)) es equivalente a maestro o "su excelencia". La palabra rabino deriva de la raíz hebrea רַב rav, la cual significa, en hebreo bíblico, "abundante" o, en arameo, "distinguido".
Era una figura netamente farisaica en sus orígenes, hacia el siglo III a. C., perseguía desplazar a los falsos sumos sacerdotes del partido (Kat/Majlaqah) saduceo, a través del culto sinagogal, pero es desde el año 70 d. C., tras la desaparición del segundo templo a manos del ejército del "imperio impío" (imperio romano), que logró instaurarse como la nueva autoridad y escuela espiritual de los judíos.