Clostridium es un género de bacterias anaerobias. Se trata de bacilos grampositivos, parásitos y saprófitos. Algunos de esos géneros esporulan[1] y son móviles, en general por la presencia de flagelos peritricos. Toman la forma de un fósforo, de un palillo de tambor o de un huso de hilar, y de ahí su nombre en griego "klostro", que significa huso de hilar.[2] Las especies más importantes son el Clostridium botulinum causante del botulismo, el Clostridium novyi, Clostridium septicum, Clostridium perfringens causantes de la gangrena gaseosa y Clostridium tetani, del tétanos.
En 2016, las especies C. difficile y C. mangenotii fueron reclasificadas en el nuevo género Clostridioides.[3]
Se ha sugerido que filogenéticamente es un género polifilético que se dividiría en varios géneros diferentes y no estrechamente emparentados.[4]
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