El coeficiente de caja, también denominado coeficiente de encaje bancario, coeficiente legal de reservas, coeficiente de reservas o encaje legal,[1] es la porción de depósitos de un banco que debe ser mantenido en reservas líquidas (en sus propias arcas o ante otras instituciones financieras),[1] y por tanto no se puede usar para inversiones ni préstamos. Las autoridades monetarias de cada país establecen un coeficiente mínimo de reservas que todas las entidades financieras han de cumplir. En algunos casos, las entidades financieras pueden colocarse por encima del mínimo fijado legalmente.[2]