El desarrollo social hace referencia a la evolución y mejora de las condiciones de vida de los individuos de la sociedad y de las relaciones que estos individuos mantienen entre sí, y con los demás grupos e instituciones que conforman el tejido social de una comunidad. Consiste en el desarrollo del capital humano y el capital social de una comunidad, que abarca aspectos como la salud, la educación, la seguridad ciudadana y el empleo, y sólo se realiza reduciendo los niveles de pobreza, desigualdad, exclusión, aislamiento y vulnerabilidad de los grupos más necesitados.[1] De acuerdo al Banco Mundial, el desarrollo social «se centra en la necesidad de "poner en primer lugar a las personas" en los procesos de desarrollo».[2]
Con base en lo que muestran los datos empíricos y la experiencia en campo, el desarrollo social promueve el crecimiento económico y conduce a mejores intervenciones y a una mayor calidad de vida.[2]