El gazapo, tal y como lo define tanto el Diccionario de la lengua española («yerro que por inadvertencia deja escapar quien escribe o habla»[1]) como el Diccionario Clave («yerro o equivocación que se comete al hablar o al escribir»[2]) y el Salamanca de la lengua española («equivocación material que se comete por distracción al hablar o al escribir»[3]), puede dar lugar a situaciones divertidas o, incluso, tensiones diplomáticas entre estados.