En la teología de la Iglesia católica, la infalibilidad papal o infalibilidad pontificia constituye un dogma desde 1870, según el cual el papa estaría preservado de cometer un error cuando promulga a la Iglesia una enseñanza dogmática en temas de fe y moral bajo el rango de «solemne definición pontificia» o declaración ex cátedra. Como se considera una verdad de fe, ninguna discusión se permite dentro de la Iglesia católica y se debe acatar y obedecer incondicionalmente.