El Programa Bracero fue un programa de acceso legal para trabajadores extranjeros para cuestiones agrícolas (principalmente mexicanos) iniciado el 4 de agosto de 1942, y la vigencia de una serie de leyes y acuerdos diplomáticos, cuando Estados Unidos firmó el Acuerdo de Labor Agrícola Mexicana con México.
El acuerdo garantizaba condiciones de vida dignas (saneamiento, alojamiento y alimentación adecuados) y un salario mínimo de 30 centavos la hora para los trabajadores agrícolas, así como protecciones contra el servicio militar forzoso, y una parte garantizada de los salarios destinada a un sector privado, en una cuenta de ahorros en México. El acuerdo también permitió la movilidad de trabajadores contratados por Guam como una medida temporal durante las primeras etapas de la Segunda Guerra Mundial.[1]
El tratado se amplió con el Convenio Laboral Migrante en 1951, promulgado como enmienda a la Ley Agrícola de 1949 (Ley Pública 78) por el Congreso,[2] que fijó los parámetros oficiales del programa bracero hasta su terminación en 1964.