Una punta de flecha es un elemento, por lo general afilado, que está situado en la parte anterior de una flecha, aumenta su peso y adelanta el centro de gravedad, confiriéndole más estabilidad en vuelo para que su alcance sea mayor y más preciso.[1] Históricamente, las puntas de flecha eran de piedra o de materiales orgánicos; conforme la civilización humana avanzaba fueron utilizados otros materiales, generalmente metales. Las puntas de flecha son importantes piezas arqueológicas y una subclase de punta lítica.