La talasoterapia es un método de terapia que se basa en el uso de diferentes medios marinos, juntos o por separado (agua de mar, algas, barro y otras sustancias extraídas del mar) y del clima marino como agente terapéutico. El agua se recoge en lugares donde esté limpia para garantizar la ausencia de agentes contaminantes. Si contiene arena se deja decantar y queda transparente antes de ser aplicada (el agua de mar elimina por sí misma los patógenos por ósmosis).[1][2]
Etimológicamente proviene del griego thalassa (mar) y therapeia (terapia), y se debe al médico francés Dr. Bonnardiere de Arcachon (1869).[3] Su formulación se debe al médico británico Richard Russel (ver el artículo en la Wikipedia en inglés) que desarrolló, a mediados del siglo XVII, el primer tratado médico de curas marinas.